DÍA DE LA ALIMENTACIÓN EN VENEZUELA; 18 DE NOVIEMBRE.
Lcdo. Richard E. Vivas
Director (E) de Atención Nutricional Integral IAANEM
Cada 18 de noviembre se celebra en nuestro país el Día de la Alimentación, esto desde el año 1951, por el presidente para la época Rómulo Gallegos, se toma la semana alrededor de esta fecha para promover la adquisición de buenos hábitos alimenticios en la población a fin de garantizar una mejor calidad de vida.
Venezuela es un país que presenta una gran biodiversidad ambiental y riqueza natural que lo hacen potencialmente viable para lograr satisfacer las necesidades alimentarías y nutricionales de la población, estas necesidades se han visto afectados en la actualidad por la situación económica que hace que la población adopte nuevos hábitos alimentarios perjudicando así su desarrollo, más específicamente el alto consumo de carbohidratos (arroz, pasta), bajo o nulo consumo de frutas y hortalizas, además de la precaria ingesta de alimentos proteicos de alto valor biológico debido a los precios tan elevados que afectan la economía familiar.
Cuando nos vamos a referir a una alimentación sana, variada y balanceada decimos que es aquella que aporta todos los nutrientes esenciales y la energía que cada persona necesita para mantenerse sana desarrollarse plenamente y protegerse de enfermedades, ésta debe cumplir con las siguientes características:
• Debe ser adecuada: Para conservar la salud, asegurar el crecimiento y desarrollo de los niños y adaptada a las necesidades y gasto energético de cada individuo.
• Suficiente: Para cubrir las exigencias y mantener el equilibrio del organismo.
• Completa y variada: La cantidad de alimento a consumir es variable y en ello influye numerosos factores, como la actividad física, los hábitos alimentarios, el estado fisiológico, entre otros.
Desde el Instituto de Autónomo Alimentación y Nutrición del Estado Mérida y siguiendo lineamientos del Ciudadano Gobernador Abg. Ramón Guevara Jaimes todo el año se viene desarrollando actividades en pro de ayudar a la población merideña a modificar sus hábitos alimentarios y por ende mejorar su calidad de vida pese a la crisis existente como se mencionó anteriormente y que está afectando la calidad y cantidad de alimentos que se ingieren.
Es fundamental preocuparnos por tener una alimentación saludable ya que se ha demostrado que una buena alimentación nos previene de desarrollar enfermedades crónicas degenerativas como la obesidad, hipertensión, enfermedades cardiovasculares, osteoporosis, diabetes (tipo 2), algunos tipos de cáncer, entre otros permitiendo mejorar así la calidad de vida en todas las edades.